Me gusta (ría) vivir la vida sumando. No siempre lo consigo, pero lo intento con fuerza cada día. Se trata de vivir sin restas, sólo sumando, con lo cual, en las relaciones humanas uno se pega a todo lo que le gusta de los demás y desestima sin importancia aquello que nos separa. Sí, es difícil, pero útil. Al final uno puede llegar a comprender partes de otras personas y apreciarlas por ellas. Y es bonito no darle mayor importancia a todos esos aspectos en los que no coincidimos. Y luego, aparece el héroe, que es el que hace esto aún con la insistencia de los demás en creer que llevarse bien es estar de acuerdo al ciento por ciento, y que un pequeño incidente les lleva ya a establecer ciertas sospechas.
Sumar, sumar es lo que importa. Caminar paralelos, perpendiculares, oblicuos, pero cambiando de dirección fácilmente para cruzarnos en decenas de puntos de intersección que nos permitan ser mejores.
¡Sigamos sumando!
Un blog en el silencio de la inmensidad de voces para reflexionar desde lo cotidiano acerca de las personas de verdad, los héroes y heroínas cotidianos, además de compartir pensamientos con el mundo. Casi todos nosotros. Este blog nació anónimo a través de mi heroína interior María Nónima hasta que comprendí que es poco heroico esconderse. Hoy, este es mi blog.
